Por @socialniuscom, sígueme en Twitter
Cuántas veces hemos escuchado esa frase tan común de las madres: “Con tanto ordenador te vas a quedar tont@” o en su versión más moderna cambiando la palabra ordenador por Facebook o cualquier tipo de red social. Pues muy a su pesar, con todo el cariño que les tenemos a nuestras queridas progenitoras, han tenido que venir investigadores canadienses y estadounidenses (que sacan estudios hasta de debajo de las piedras) para echar por tierra esas creencias con las que tantos y tantos años han querido amenazarnos para que no viésemos la vida pasar en una silla delante de una pantalla (¡y porque algunas no conocen el Candy Crush!). Pues a lo que íbamos, estos investigadores han asegurado que las redes sociales hacen a las personas más inteligentes.

Y que conste que a veces no son las únicas que piensan que estar todo el día delante de Facebook, Twitter o cualquier otra red social, o incluso delante del ordenador, es algo ‘friki’. Todo el día que si actualizo mi perfil, que si subo fotos, que si comento, que si le doy a Me gusta… a veces parece que el ratón es una extensión de nuestra mano. Pero contra todo pronóstico esta última investigación revela que las redes sociales mejoran la transmisión de conocimientos y habilidades en los usuarios.
El estudio Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences llevado a cabo por la Universidad de Columbia Británica en Canada y por la Universidad de California, en Estados Unidos tenía como objetivo demostrar la importancia de estas redes en relación a la acumulación y la conservación de conocimientos. Para la realización del estudio dividieron a los participantes en dos grupos. El primero se basó en el patrón profesor-alumno y el segundo grupo adquirió conocimientos a través de cinco profesores que se establecieron en el grupo denominado generación anterior.
Tras establecer estos grupos y comparar las habilidades adquiridas, los investigadores comprobaron que los integrantes del grupo uno perdieron parte de los conocimientos adquiridos o se mantuvieron al nivel de la “primera generación” en cuanto a habilidades, al contrario que los del grupo dos, cuyas habilidades se incrementaron. Esto se debió según los investigadores a la interacción social en la conservación del conocimiento.
Por ello, las redes sociales que mantienen continuamente a los usuarios en contacto y compartiendo contenidos ayuda a compartir conocimientos y por lo tanto a elevar nuestra inteligencia. ¡Para que luego digas, mamá!